
Los colores claros y cálidos añaden espacio a la habitación. El uso del blanco y la madera proporciona una imagen de conjunto armoniosa. También el uso de moqueta en una zona pequeña armoniza con el sofisticado interior. La cocina está dispuesta en un rincón compacto, sencillo, original y de buen gusto. Esta solución maximiza la comodidad de cocinar, porque todo está al alcance de la mano. En el dormitorio sólo se utilizan colores claros: blanco, gris y madera. El suave y monótono resplandor de las luminarias empotradas confiere a esta habitación un aire chic y acogedor.






Cortesía de See Chee Keong.