En muchos de los hilos de arquitectura y diseño de la Ciudad del Foro sorprende la diversidad de proyectos arquitectónicos originales y únicos. Y probablemente muchos de ustedes se habrán sorprendido alguna vez preguntándose hasta qué punto pueden ser ingeniosas las soluciones sencillas, sin resultar excesivamente pomposas y saturadas de elementos diferentes. Para corroborarlo, el tema que nos ocupa invita a apreciar uno de los singulares proyectos del estudio portugués Pitágoras Arquitectos.



El exterior y el interior de la casa de campo son elegantes en su sencillez. Es increíble lo bonita y elegante que puede quedar una superficie de hormigón normal sin enlucido ni pintura. Algunos paneles de la fachada se recubrieron de zinc antracita para darles un acabado noble de alto brillo. Para crear un conjunto armonioso, la mayoría de los revestimientos de los balcones y terrazas son del mismo tipo de madera que la utilizada en las viviendas. Así, los diseñadores decidieron ampliar visualmente los espacios interiores.


El paseo perimetral y el camino de entrada a la mansión están pavimentados con roca basáltica. De este modo, ni siquiera las lluvias torrenciales erosionan su superficie y quedan intactas.






Los grandes ventanales panorámicos del suelo al techo realzan visualmente el espacio interior de las habitaciones, difuminando la frontera entre el interior y la naturaleza. Así, incluso en el dormitorio o el salón, el baño o la piscina, podrá sentir la libertad en lugar del espacio cerrado. Además, las estructuras transparentes no sólo crean un interior de diseño ligero, sino que también permiten admirar el magnífico paisaje, contemplar cómo los rayos del sol poniente doran las paredes y tejados de las casas de la ciudad lejana, observar el florecimiento gradual de la primavera y el desvanecimiento otoñal de la naturaleza.





