
La otra mitad del edificio reformado ofrece unas vistas impresionantes del agua. Enormes ventanales sustituyen por completo una de las paredes. No es de extrañar que las habitaciones resulten mucho más luminosas y cálidas a la luz del sol.
En general, el interior parece muy cuidado, luminoso y literalmente "envuelto" por toda la madera. Crea el ambiente más acogedor posible. Sin embargo, las amas de casa aún tendrán que acostumbrarse al nuevo entorno. Ahora el ambiente en casa dependerá más del tiempo que haga fuera. Aunque es poco probable que ni el más nublado de los días pueda aguar la fiesta a los residentes de esta elegante casa.






