Siempre es interesante llenar de nueva vida una casa antigua. Muchas opciones. Pero complica aún más las cosas. El terreno tiene una superficie inclinada, linda con una calle muy transitada, y los propietarios son reacios a cambiar un centímetro la estructura de su actual vivienda. Lo atesoran como un recuerdo de una época pasada. Una tarea aparentemente insuperable? Pero nada es imposible, y hoy le invitamos a Ohio, a un lugar llamado Bay Village.
Allí se encuentra una mansión privada con una geometría del espacio tan compleja. La renovación finalizó en 2011. La proximidad de la calle no era un obstáculo, una pared en blanco protegía a los propietarios del bullicio. Las plantas verdes trepadoras integraron orgánicamente la nueva parte de la casa en la naturaleza circundante y eliminaron el aspecto monótono.




Materiales antiguos y nuevas tecnologías, espacios formales e informales, tierra y cielo… todo se funde en una armoniosa mezcla de dos siglos.




Cortesía de RobertMaschkeArchitects.